Regla Uno- La vida no es justa, acostúmbrate a ello.
Regla Dos- Al mundo no le importará tu autoestima. El mundo esperará que logres algo, independientemente de que te sientas bien o no contigo mismo.
Regla Tres- No ganarás mucho dinero justo después de haber salido de la universidad y no serás un vicepresidente de una empresa con auto de empresa hasta que estudiado y trabajado mucho.
Regla Cuatro- Si piensas que tu profesor es duro, espera a que tengas un jefe. Ese sí que no tendrá vocación de enseñanza ni la paciencia requerida.
Regla Cinco- Trabajar volteando hamburguesas o limpiando no te quita dignidad. Tus abuelos tenían una palabra diferente para describirlo: le llamaban oportunidad.
Regla Seis- Si metes la pata, no es culpa de tus padres, así que no lloriquees por tus errores; aprende de ellos.
Regla Siete- Antes de que nacieras, tus padres no eran tan aburridos como son ahora. Ellos empezaron a serlo por pagar tus cuentas, limpiar tu ropa sucia y escucharte hablar acerca de lo súper que eres y lo aburridos que son ellos. Así que antes de emprender tu lucha por salvar al mundo de la contaminación dejada por la generación de tus padres, inicia el camino limpiando las cosas de tu propia vida, empezando por tu habitación, escritorio, armario y estuche.
Regla Ocho- En la escuela puede haberse eliminado la diferencia entre ganadores y perdedores, pero en la vida real no. En algunas escuelas ya no se pierden años y te dan las oportunidades que necesites para encontrar la respuesta correcta en tus exámenes y para que tus tareas sean cada vez más fáciles. Eso no tiene ninguna semejanza con la vida real.
Regla Nueve- La vida no se divide en semestres. No tendrás vacaciones de verano largas en lugares agradables. La verdad es que muy pocos jefes se interesarán en ayudarte a que lo pases bien y te diviertas. Todo esto tendrás que hacerlo en tu tiempo libre.
Regla Diez- La televisión no es la vida real. En la vida cotidiana, la gente de verdad tiene que trabajar.
/via @billgates