(Imagen: Kaia Nao)
En el borde de su visión los remolinos de agua se mueven en una dirección, pero la estrella de mar va en la otra, flotando sobre el fondo.
La propia imagen es, por supuesto: el movimiento que se crea en nuestra cabeza. Se utiliza el fenómeno de la deriva de la periferia para hacernos ver movimiento donde no lo hay. Los distintos contrastes entre los colores son la clave para hacernos ver la estrella y el movimiento de fondo en direcciones opuestas.
Esta imagen fue creada por Kaia Nao