Al igual que un escultor tradicional que talla un trozo de piedra, el artista Alexander Korzer-Robinson destripa texto y los espacios en blanco dejando sólo las imágenes. Al hacerlo, se crea nuevas narrativas utilizando sólo las ilustraciones preexistentes, cuadros, gráficos y otros elementos visuales impresos en el interior de cada libro. De su obra, dice: