Hawking perdió la capacidad de hablar en 1985, cuando, en un viaje al CERN en Ginebra, cogió una neumonía. En el hospital, fue puesto en un ventilador, pero su estado era crítico. Los médicos sugirieron entonces a esposa de Hawking, Jane, apagar el soporte de vida. Ella negó con vehemencia. Hawking fue trasladado al Hospital de Addenbrooke, en Cambridge, donde los médicos lograron contener la infección. Para ayudarle a respirar, también realizaron una traqueotomía, que involucró a cortar un agujero en el cuello y la colocación de un tubo en la tráquea. Como resultado, Hawking perdió irreversiblemente la capacidad de hablar.
Durante un tiempo, Hawking logro comunicarse utilizando una tarjeta de ortografía, para lo que usar pacientemente letras y formar palabras con movimiento de cejas.
En 2011, Stephen Hawking envió un mensaje al fundador de Intel Gordon Moore que decía "Mi voz es muy, muy lento en estos días. ¿Hay alguna manera que Intel me pueda ayudar?" Ellos lo hicieron.
Stephen Hawking conoció a Gordon Moore, cofundador de Intel, en una conferencia en 1997. Moore noto que la computadora de Hawking, que utilizaba para comunicarse, tenía un procesador AMD y le preguntó si prefería en cambio a un "equipo real" con un microprocessor Intel. Desde ese momento Intel ha estado proporcionando a Hawking soporte técnico y computadores personalizados cada dos años.