Ronnie Bridgeman llorando después de haber sido absuelto en la corte en Cleveland, EE.UU., 09 de diciembre 2014.
Ronnie tenía solo 17 años cuando él y su hermano (Wiley Bridgman) fueron enviados al corredor de la muerte por un presunto asesinato de Harold Franks, cometidos 1975. En 1978, el veredicto fue cambiado a cadena perpetua. La única prueba de su culpabilidad eran el testimonio de un niño de 12 años de edad, Eddie Vernon, quien afirmó que no había visto el momento del ataque. Y sólo después de casi 40 años Vernon admitió que calumnió a Ronnie, bajo presión de los detectives y que se convirtio en la base para la reconsideración del caso y su posterior justificación.
Habían tardado casi 40 años, pero Ajamu y su hermano ya no eran unos asesinos convictos, solo han sido víctimas de una terrible injusticia.